Para decir Victoria
Vengan las musas ebrias con sus dones
a urdir la rebeldía de mi pluma,
que dispersa y sutil se va la bruma
cuando el alma descalza sus pasiones.
Vengan con su murmullo los gorriones
que agitan en mi otoño ramas ocres
y alboroten sus trinos mis mediocres
letras vanas, atadas con jirones.
Que no basta decir lo necesario,
hace falta gritar! y no me reblo,
hace falta acabar con el bestiario,
hace falta zanjar al mercenario
que usura con el hambre de mi pueblo,
auque rueden las cuentas del rosario !