jueves, enero 04, 2007

A solas






por Juan de los Palotes.



Otra vez

la soledad se desenrosca.
Se expande, descomprime,
se desliza, se dispersa,
va tomando los contornos
de mi cuarto mis libros y mi mesa.
Flota, se agita, retumba sorda en las paredes,
devora los ambientes, los copia en su volumen.

La respiro.

A poco me acostumbro,
disfruto su presencia destemplada
y los tintes grises de su silencio obeso,
que no tiene por timbre oscuros graves
ni agudos quejumbrosos.
La puedo ver crecer en el letargo
del largo bostezo memorioso.

Se agiganta

con mansa prudencia de extranjero
que no elige ni exige ni corrige,
que no anula ni invalida ni amenaza.
Solo está, solo acompaña en su constancia.
Entonces, por que abandonarla?
Por que patearla fuera si es tan mía
como mi propia alma?

Solo echo de menos cuando llega
una presencia humana,
el timbre de otra vos y otra palabra y

la rutina

absurda del perdón
ante la ofensa injusta y la disculpa,
en la gestual ofrenda de una taza.
y estar solo con ella y la caricia
en la inmensurable planicie

de esta casa.

4 comentarios:

Jezabell Suad dijo...

Hola!
Entré porque me llamó la atención tu nombre, jeje Yo iba a bailar a un boliche de Ramos Mejía que se llamaba "Juan de los palotes". Ahora me quedo porque me llama la atención lo que escribís, por cierto,muy buenos poemas.
Yo también escribo, o lo intento, asi que feliz de encontrar con quien identificarme.
Saludos desde La Plata
Jezabell

Maria Ines dijo...

La soledad es una buena compañera que a pesar de no compartir un café y una charla mundana te permite entrar en vos y conocerte con el debido tiempo que ello merece.
Lo malo es sentirse solo, sufrir la soledad y para ello la única cura es la compañía.

Horacio Fioriello dijo...

Uno inexorablemente está encadenado a la propia companía, estarse en uno significa aceptarse y quererse,como en la teoría del derrame, nada podemos dar mientras nuestra propia copa no desborde

Gracias amiga

y a vos no te enseñaron a decir gracias, vas a quedar verde de tantos mates....jajajaja

Horacio

Horacio Fioriello dijo...

Jezabell

Sobre tus alas podría decir mucho...
prefiero escribirtelo en tu blog, me pareció buenísimo

Horacio