martes, febrero 10, 2009

hijaputeses indigestas


Goza la existencia un anémico alegato
Y la muerte su defensa enarbola estoica,
con erudición de cursi demagogia literaria.
Las mayores infamias ya se han dicho y se repiten
con vicios de hijaputeses indigestas de ironía.
¿Que veinte poemas de amor ni tres carajos!?
Hoy los condones son mascotas infladas para niños
y las cartas de amor que me escribías
son tan solo un montón de cenizas
en la hoguera de un asado sin carne en la parrilla.