viernes, febrero 11, 2011

el bar






"Si te atreves a sorprender /la verdad de esta vieja pared; /y sus fisuras, desgarraduras, /formando rostros, esfinges, /manos, clepsidras, /seguramente vendrá /una presencia para tu sed, /probablemente partirá /esta ausencia que te bebe."
A. Pizarnik


Todos comenzamos escribiendo poesía lo escucho decir, será que poesía es apenas los primeros pininos de alguien que aspira a carretear en el oficio de escribir, que los demás géneros son para los ya consagrados...

El hombre calvo de ojos estrábicos no se corrió de su lectura, un libro de tapas duras y hojas manchadas, una edición de las primeras que llegaron al país en manos de algún emigrante . Boukowski. Frente a él, en otra mesa, un joven gordo de colita recogida con un palillo chino exclama al intentar resolver el crucigrama del diario: Jonás Edward Salk 1914-1995? ...el gato paso por abajo de la mesa levantando la cola con ese aire burgués y despreocupado de quien percnota en la cocina de un bar. Nadie respondió. (para que acordarse si ya Sabin es oral.)

En la pared, se lee escrita en negritas de spray un: "algún día encontraras este diario y será antiguo"

Un pibe de unos (16) entro gritando, saltó la barra del bar y le puso al mozo un cuchillo en la garganta, mientras le exigía le entregue toda la plata. Un resplandor ilumino detrás del pasa platos y un circulo del tamaño de una moneda roja broto de la frente del pibe.

En la pared alguien borroneo el nombre de Alejandra Pizarnik para escribir: "quiero morir." pero no...
El hombre calvo de ojos estrávicos no se corrió de su lectura, un libro de tapas duras y hojas manchadas, una edición de las primeras que llegaron al país en manos de algún emigrante . Boukowski. (Releyó en vos alta)
"No es mi muerte lo que/ Me preocupa, es mi mujer/ Que se quedará con este/ Montón de/ Nada."