yo Noelia
a Noelia Fioriello
Aún sin pertenencia de nombre que te apropie
en parte, al menos, trata de darme un mundo
chiquitito.
En un campo de ideas y de absurdos
Ara, siembra con tus manos
riega lluvia de lágrimas de risa;
que trepen sin violencia futuro de imposibles.
Con los pedazos rotos que quedan de tu tiza
repiquetea en voz alta siete notas de nuevos continentes;
reinventame simiente que fecunde familia,
dormirme con tu voz, quiero,
al despertar
seas:
Omnipresente.
Me elijas hija, proyección y sombra
del vuelo imaginado de tu pluma,
yo, Noelia, por mi parte, no te prometo más
que mi memoria; ser:
Antígona en destierro hasta Coloma,
bastón en la noche animal de tus recuerdos.
Aún sin pertenencia de nombre que te apropie
en parte, al menos, trata de darme un mundo
chiquitito.
En un campo de ideas y de absurdos
Ara, siembra con tus manos
riega lluvia de lágrimas de risa;
que trepen sin violencia futuro de imposibles.
Con los pedazos rotos que quedan de tu tiza
repiquetea en voz alta siete notas de nuevos continentes;
reinventame simiente que fecunde familia,
dormirme con tu voz, quiero,
al despertar
seas:
Omnipresente.
Me elijas hija, proyección y sombra
del vuelo imaginado de tu pluma,
yo, Noelia, por mi parte, no te prometo más
que mi memoria; ser:
Antígona en destierro hasta Coloma,
bastón en la noche animal de tus recuerdos.