domingo, febrero 24, 2008

...: Agobio ( Cantata en Mi Mayor al desocupado)



Yo solo se de las palabras, no me pidas más nada,
que no tengo.
Yo se de las palabras que huelen a cebolla,
de las largas palabras sin cáscara que irritan,
de malas por temidas, que brotan de la cloaca
como de un manantial de orines y de heces.
Yo se que son trompadas que duelen al oído,
de tanto que se amasa con la palabra mierda
el alma de las masas que leva y que fermenta
como torta de bosta, como panes de estiércol.
Yo se que te molesta que te diga que siento
arcadas de tragar siempre el mismo consejo, :
¿por que no escribes "lirio"... o por que no "conejo"...?

A mi se me termina el gas de la garrafa
y no tengo ni quien me caliente el pellejo.
Yo se de una palabra por demás solitaria
que me estrangula el alma si la pronuncia un niño
por que no tiene techo ni patrón ni sustento
ni una caja de pan, ni plan de ocupamiento.
Yo se de la peor y de la más obscena, palabra
que haya escrito el hombre y su excremento,
yo se de la palabra que más trabajo cuesta
pronunciar sin desprecio, sin miedo ni violencia;
es la que nadie mira ni quiere tener cerca
es la que nadie quiere pronunciar en voz alta.
Es la que dobla espaldas hasta que en cuatro patas
caminas como rata rebuscando el sorete
que llevarte a la boca para seguir despierto... :

2 comentarios:

Tabita dijo...

que imagenes, que fuerte, es como un reclamo a la indiferencia que no es reclamo... me gusto, hace tiempo no me gustaba algo tuyo como este poema. Besos al desaparecido

viruta dijo...

saber de las palabras es como tener entre manos todo el conocimiento del mundo. yo me lo chuparía antes que se derrame

graníticos poems que agitan la sustancia y dictan